La nueva Fiat Strada llega con 25 años de experiencia en el mercado de las pickups compactas, en el que se ha ganado la elección de los usuarios, por capacidad, motor rendidor y buen diseño, que en esta nueva generación se renueva por completo, tomando rasgos característicos de otros modelos de la marca, sobre todo los de la pickup mediana Toro.
Muestra un capot bien lanzado, con nervaduras a los costados, que culmina sobre los faros divididos, con tecnología LED, incluso en las DRL (luces de circulación diurna), mientras que los antiniebla y las luces de giro disponen de lámparas halógenas, similares a los del compacto Mobi. En el lateral, destacan los guardabarros ben marcados, con una falsa salida de aire atrás, mientras que en el sector posterior destacan las luces, el protector de luneta y un paragolpes de metal enfundado en plástico. El portón de la caja es profundo, fácil de subir y bajar gracias a una pequeña barra de torsión entre las bisagras.
Seguridad
El equipamiento de seguridad es el justo y necesario para cumplir con las exigencias para nuestro mercado, más algunos detalles, ofreciendo airbags frontales y laterales, cinco cinturones de seguridad, los delanteros retraibles con 3 puntos y regulación en altura, tres apoyacabezas ajustables posteriores, sistema Isofix, asistente de arranque en pendiente, control electrónico de estabilidad, y control de tracción avanzado con E-locker (TC+).
En cuanto al sistema de suspensión, se lo nota más duro, especialmente en el eje trasero, donde debe recibir el peso de la carga, mientras que adelante es tipo McPherson, ofreciendo un nivel de confort mucho más completo que la generación anterior, mostrándose firme, pero sin golpes o asperezas.
El sistema de frenos, con ABS, con función off-road y EBD, se muestra eficiente, sin demostrar fatiga ante frenadas reiteradas, y con buena distancia de frenado.
Motor
La versión que probamos ofrece el conocido naftero de 1.4 litros, 8 válvulas, con 85 CV y 12,6 kgm, que entrega buenas respuestas para la pickup chica. La caja de cambios manual ofrece relaciones cortas, ofreciendo dinámica en la ciudad, mostrando que en ruta logra 120 km/h a casi 4000 rpm, por lo que hay que estar atento en el consumo, sobre todo cuando se lleva carga.
Se lo siente confortable y tranquilo, sin evidenciar ruidos. En cuanto al consumo, en condiciones normales y cuidando las aceleraciones logra buenas respuestas, con 9,2 l/100 km en ciudad y 7,80 l/100 km en la ruta. Por lo que se pueden lograr más de 680 km de autonomía promedio, gracias a los 55 litros que carga el tanque.
Confort y equipamiento
En el interior, a pesar que manejamos la versión Endurance (entrada de gama), se nota un adelanto, con panel completamente nuevo, buenas terminaciones de plástico sólido, con calidad en las texturas y no se notan filos peligrosos ni aberturas en los engarces. Destaca la funcionalidad y gran cantidad de porta objetos. No hay problemas de espacio en el sector delantero gracias a las dos butacas, de regulación manual, buena sujeción lateral y apoyacabeza integrado. El volante tiene sólo regulación en altura y el tablero de instrumento, relojes que analógicos y digitales, es simple y ofrece display con información completa.
Al ser una pickup chica la plaza trasera es bastante compacta por lo que habrá problemas para los que midan más de 1,70, ya que tendrán inconvenientes para acomodar las piernas. La altura del techo es buena, al igual que en lo ancho.
Hay que confirmar que la Strada tiene una capacidad de carga de 650 kg y un volumen de caja de 844 litros. La rueda de auxilio, igual a las rodantes, lo que es una buena noticia, está bajo la caja.
La entrada a la gama que manejamos ofrece lo básico, como para no subir el precio, pero mejora a la generación anterior y además ofrece la posibilidad de incorporarle más componentes con los packs a los que acostumbra la marca. La pickup Endurance doble cabina viene provista de serie con equipo de audio con radio AM/FM integrada con USB y conectividad Bluetooth, comandos de radio/teléfono en el volante, aire acondicionado, computadora de abordo, dirección hidráulica, con sistema EPS (por sus siglas en inglés Electric Power Steering), indicador de cambio de marchas, luz de lectura, porta objetos en las puertas y en la consola central y toma corriente 12v entre los componentes más destacados.
Conclusión
Sin duda la nueva Fiat Strada muestra un salto hacia adelante en esta nueva generación. La versión que manejamos cuesta $ 1.895.000, pero arranca con la cabina extendida en $ 1.753.000 y llega $ 2.338.000, en la Volcano. Esta pickup compacta ofrece un andar superior, muchísimo más confort, está bien insonorizada y más capacidad y comodidad para los pasajeros, por lo que, sin duda es una buena elección, para el trabajo y para la familia.
