Los asientos infantiles son la mejor sugerencia para que llevemos a los más pequeños, con cuidado, dentro de los vehículos, ya que, dos de cada tres niños no viajan de manera correcta o segura cuando son transportados en automóvil, según lo confirman diferentes asociaciones civiles, como Luchemos por la Vida, por ejemplo, la organización Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Sociedad Argentina de Pediatría. No se trata solo de que no usen un asiento infantil obligatorio, sino de otros errores que pueden tener serias consecuencias en caso de accidente. Por ejemplo, se subraya que en la Argentina las lesiones ocasionadas en accidentes de tránsito constituyen la primera causa de muerte y discapacidad en personas de entre 5 y 35 años. Los estudios también señalan que en la mayoría de los casos se utiliza un sistema de retención inadecuado o que los niños no están sujetos correctamente. La diferencia entre el uso correcto e incorrecto puede reducir el riesgo de víctimas en un 75% y las lesiones en un 90%. Por eso, con objetivo de la seguridad de los más chicos, que por lo general no tienen noción del peligro que se corre dentro de un vehículo al estar sin una buena sujeción, estas son algunas sugerencias básicas:
1. Usar un asiento para niños certificado de acuerdo con la altura y el peso: la edad por sí sola no determina qué tipo de asiento usar, sino más bien el peso y la altura del niño; ya que es crucial usar un asiento para niños de la categoría de grupo adecuada, ya que el diseño de cada uno cumple con los requisitos específicos para proteger los cuerpos de los niños.
Hay que pensar sobre el uso de asientos de uso manual, ya que los materiales pueden deteriorarse después de un largo período y es posible que no brinden la protección adecuada. Después de un accidente, hay que reemplazar todos los asientos para niños.
2. Siempre en los asientos posteriores, ya que se ha comprobado por diversos estudios, que es el lugar más seguro para viajar y, por lo tanto, es donde deben transportarse los menores. Aunque el asiento del pasajero delantero está equipado con un sistema de retención infantil, solo es recomendable utilizarlo en ocasiones excepcionales, por ejemplo, cuando los asientos traseros ya están ocupados por otros niños. En este caso, hay que recordar que el airbag debe estar desactivado.
3. Sujetar el asiento para niños correctamente: es importante leer detenidamente las instrucciones de instalación para el asiento para niños y verificar que esté correctamente colocado antes de cada viaje. El método más fácil y conveniente es el Isofix. Si el asiento requiere instalación con el cinturón de seguridad, la sugerencia es que hay que asegúrese de que el cinturón pase correctamente por los lazos indicados por el fabricante.
4. Apretar las correas del arnés, ya que estas suelen estar lo suficientemente flojas como para que los niños liberen los brazos, lo que podría tener graves consecuencias en caso de colisión. Las correas del arnés deben estar apretadas y ajustadas al cuerpo. Puede probar esto intentando pellizcar la correa; si esto se puede, hay que apretarlo un poco más.
5. Mirando hacia atrás por el mayor tiempo posible, ya que en caso de un impacto frontal, el cuello de un bebé no puede soportar el peso de su cabeza cuando es impulsado hacia adelante. Por esta razón, los asientos del Grupo 0 y 0+ están diseñados exclusivamente para mirar hacia atrás. Es obligatorio mantener el asiento orientado hacia atrás al menos hasta que el niño alcance los 15 meses de edad, y puede permanecer en esta posición con niños de hasta 105 cm de altura según lo prescrito por la norma.
6. No se deben hacer excepciones durante los viajes cortos, ya que los viajes diarios de la casa a la escuela o la casa de un amigo, por ejemplo, representan la mayor incidencia de conductas de riesgo. Según la ANSV el 50% de los conductores admiten transportar niños sin asiento infantil en algunas ocasiones. Otros permiten que los niños mayores se abrochen sin verificar para asegurarse de que lo hayan hecho correctamente.
7. Sin abrigo o mochila: para viajes que duran solo unos minutos, muchos niños se colocan en sus asientos mientras todavía usan un abrigo o incluso una mochila, lo que evita que el cinturón permanezca ajustado contra el cuerpo del niño y puede impedir el funcionamiento correcto del arnés de seguridad. Aunque el viaje es una distancia corta, nunca hay que olvidar que la seguridad es una prioridad desde el momento en que se arranca.
8. Colocar todo el equipo en el baúl: el equipaje y los objetos que quedan en los asientos o la bandeja posterior pueden convertirse en proyectiles en el caso de un frenado repentino o una colisión, por lo que la sugerencia es guardarlos con seguridad.
9. Hay que dar el ejemplo: la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace es tan esencial en la enseñanza como en la seguridad vial. Todos deben usar los cinturones de seguridad y los niños imitarán el comportamiento de los padres porque las acciones hablan más que las palabras.
10. En caso de accidente, siempre que sea posible, los niños deben ser retirados del automóvil en los asientos. La sugerencia es no llevarlos en los brazos, a menos que exista un riesgo inmediato de peligro, ya que esto podría causar una lesión grave.
Iniciativa
Usar el SRI reduce la cifra de siniestralidad vial infantil; el uso correcto del SRI o sillita infantil, reduce entre un 50% y 70% las probabilidades de consecuencias mortales ante un siniestro vial. Es importante remarcar que el uso del SRI o sillita infantil es obligatorio por ley, y es la forma más segura para el traslado de niñas y niños menores de 10 años, utilizando el modelo adecuado según su peso y tamaño, y siempre en los asientos traseros del vehículo. En la Argentina, según datos del Observatorio Vial, solo el 26,4% de menores de 10 años circulan en los asientos traseros con la protección adecuada. En el primer semestre de 2021, las y los niños de entre 0 y 14 años representaron el 3% de las víctimas fatales en hechos viales.